No se me ocurre nada más bonito que regalar a una madre, que todos estos detalles hechos por sus hijos, con todo el amor del mundo, y sin gastar nada de dinero, tan sólo aprovechando materiales que ya teníamos en casa.
Este 3 de mayo, y teniendo en cuenta el confinamiento, los niños han tirado de creatividad (y de buscar ideas en internet), y han hechos unas pequeñas maravillas.
Verlos trabajar a escondidas, y dedicar su tiempo y toda su ilusión, es realmente enternecedor.
Aquí, algunos de los detalles de los que os hablo:
Todo esto, aderezado con globos, un desayuno preparado por ellos, y con un teatro musical, ha sido el delicioso Día de la Madre que han preparado.
Gracias nenitos, habéis hecho muy feliz a Mamá, y a mí me tenéis enamorado!
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